Cuando Jodie y su madrastra Lola finalmente llegan al hotel, cansados de un largo viaje, no esperan su problema más reciente. ¿Solo hay una cama? Lola ya está cansada y de mal humor, quejándose de sus pies adoloridos, y Jodie solo quiere dormir un poco. Lola intenta que el hotel solucione su problema pero, por ahora, esa es la única habitación disponible. Lola solo necesita dormir, así que se quita la ropa hasta quedar en su sostén y ropa interior; Jodie no puede evitar echar algunas miradas: ¡su madrastra es sexy! Jodie se ofrece a masajearle los pies y ella se lo permite.