Paris Lincoln está teniendo dificultades para estar sola durante la semana. Trabaja duro tratando de mantener todo en orden, pero es agotador. Justo cuando está tomando una botella de agua fría para sostenerla en su cuello y tratar de refrescarse, su hijastro Parker Ambrose entra y la sorprende. Rachel enumera todas las cosas que su esposo le dejó para hacer, incluyendo reproducirse. Le pide a Parker que dé un paso adelante y sea el hombre de la casa.